Durante muchos meses, escuchar historias sobre cómo otras personas habían perdonado cosas peores que lo que yo había vivido se convirtió en una excelente terapia. Sobre todo, aquellos días en los cuales el pronóstico del tiempo dentro de mi mente auguraba alta probabilidad de lluvia y tronadas, o cuando me sentaba a freírme las neuronas rememorando escenas con la nostalgia invertida: queriendo que las cosas hubiesen sido de otra manera.
Logré ver en mis meditaciones que tras mi resentimiento había una gran energía de amor interrumpido. Días después tenía una cita con la terapista de activación linfática quien llevaba cuatro meses tratándome con las hierbas chinas “Para Cleanse” y “Tiao He Cleanse”. Vi sobre su escritorio el libro “Radical Forgiveness” (“El perdón radical”), del autor Colin C. Tipping, y le pregunté sobre el texto. “Algo me dijo que lo sacara de mi casa y lo trajera hasta aquí”, me sonrió. Apunté el título, y en esa misma semana me topé con una entrevista radial a ese autor.
Perdonar con urgencia
Aprendí que no perdonar está relacionado con permanecer en un patrón vibratorio de sentirnos rechazados o de que no merecemos cosas buenas. Bajo el resentimiento hay un profundo miedo que creció porque necesitábamos protegernos. Me preguntaba, ¿y si lo suelto, quién me protege? ¿Quién soy yo y qué queda de mí si suelto el rencor? Sin embargo, cuando manejamos nuestra vida desde ese resentimiento, herimos a mucha gente. Puse a otros a orar por mi proceso y me senté a escuchar a esa parte de mí que había estado opacada por el resentimiento. Mi voz interior me aseguró que yo sería protegida aún sin la capa de miedo. Podía dejarla ir.
De Tipping aprendí que los seres humanos existimos para, entre otras cosas, experimentar nuestras emociones. “No hay sentimientos buenos ni malos, son sólo sentimientos”, indicó. Aún me avergonzaba tener emociones, y una mentora me dijo con ternura: “Así que tienes sentimientos. ¡Bienvenida a ser humana!”
El autor también invitaba a ver “cómo nos agarramos del resentimiento aunque ello signifique morir”. “El perdón interrumpe el paso del resentimiento del cuerpo espiritual (y emocional) al cuerpo físico”, señaló. Tipping solía a preguntarle a las participantes de sus talleres que habían sufrido cáncer del seno: ¿Quién te rompió el corazón hace unos cinco o siete años? “Ellas nombraban a alguien casi inmediatamente”, relató. Le oí decir algo que había escuchado de Lovey Jane, la facilitadora de veganismo crudívoro que sanó de cáncer: que al igual que la comida con balance ácido, las emociones ácidas provocan enfermedad.
“Alguien dijo una vez que perdonar significa dejar ir cualquier esperanza de que el pasado hubiese sido mejor de lo que fue”, escuché a Jack Kornfield decir en una presentación grabada durante una charla que ofreció en la Universidad de Berkeley. Kornfield es un doctor en psicólogía quien, tras terminar sus estudios, se trasladó a Tailandia y Cambodia a realizar trabajo humanitario. Allí conoció a maestros budistas como Ajahn Chan y Maha Ghosananda, este último practicó la resistencia pacífica en Cambodia para devolverle a los habitantes afectados por el genocidio su sentido de espiritualidad y de hogar.
“Como dice el Bhavagad Gita: ‘Si quieres ver a los valientes, mira aquellos que pueden devolver amor por odio. Si quieres ver a los heróicos, mira aquellos que pueden perdonar’. (Perdonar) es no desear daño ni atacar a nadie, ni siquiera a nosotros mismos. Sin el perdón, la vida sería insoportable, sólo nos quedaría repetir el pasado una y otra vez sin sentir liberación”, señaló.
Kornfield dijo que la capacidad de amar del corazón humano es casi ilimitada, y que todos la tenemos cuando recordamos quiénes somos verdaderamente. Cada uno de nosotros contiene el misterio de un ser de consciencia pura que encarnó en un cuerpo humano. Es esa esencia la que mira a través del filtro humano y observa a la criatura que experimenta vivencias. “Una parte de nosotros sabe esto. Es desde esa consciencia que tenemos la capacidad de soltar lo que hemos vivido”, explicó.
“El perdón no significa que condonamos lo que ocurrió, no se trata de ‘perdonar y olvidar’. De hecho, el perdón podría incluir, comprensiblemente, la determinación de no permitir que esto vuelva a ocurrir. (Decidir que) voy a hacer todo lo que esté en mis manos para protergerme a mí mismo, proteger a otros y asegurar que esto no vuelva a ocurrir. El perdón no significa que tengas que necesariamente hablar o relacionarte con la persona que te traicionó… Y no es sentimentaloide, ni de manera rápida. No puedes ponerle una envoltura, sonreír y decir ‘ya perdoné’. Es un proceso profundo del corazón”, insistió.
Kornfield enseñó un ejercicio que incluía el perdón en tres direcciones: perdonarnos por lo que les habíamos causado a otros, por lo que nos hicimos a nosotros mismos y perdonar el daño que recibimos de los demás.
Su meditación consiste, en parte, en la siguiente reflexión: “Hay muchas maneras en las que otros me han dañado o herido. Todos hemos sido traicionados, todos hemos tenido sufrimiento y dolor… Recuerdo esto ahora, las veces en las que he sido abandonada, traicionada y herida por otros. Siento las penas que aún cargo… Las recuerdo ahora. Hasta el punto en que estoy lista –y éste es un proceso que no puede ser apresurado– … dirigo mi corazón hacia el perdón…Te ofrezco perdón, te dejo ir. No cargaré en mi corazón el dolor de odiarte”.
El psicólogo budista ofreció algunos pasos para perdonar:
– Sentir duelo por la pérdida de las cosas que no ocurrieron como queríamos. Decir: “ya pasó, ocurrió como ocurrió”.
-Entender que esos eventos nos hacen vulnerables, pero nos traen de vuelta a cosas verdaderamente importantes y nos ayudan a mantener un corazón abierto y vivo pese al dolor.
-Comprender que el proceso no es para nadie más, sino para la paz interior propia, por el bien de nuestra dignidad e integridad.
-Descubrir que ya no es necesario ser leal al sufrimiento propio y que éste es un proceso que requiere paciencia y respeto. Perdonamos una y otra vez hasta que llega el momento en que es posible dejar ir lo que vivimos.
-Establecer una intención de perdonar. De esa manera, programamos el compás del corazón y la psiquis humana (también podría llamarlo el GPS) en la dirección de perdonar. Podremos superar los obstáculos que encontremos si mantenemos la intención viva.
-Aprender formar internas y externas de perdón como la confesión y hacer enmiendas.
-Buscar un grupo de apoyo. Al ver las cosas que otros quieren perdonar, nos damos cuenta que no estamos solas en la experiencia, que todo el que ha amado ha sido herido, todo el que entra al mundo de los negocios se ha sentido traicionado, y todos hemos sentido dolor, pues es parte de la experiencia de estar vivos.
-Comenzar a abrir nuestro corazón de una manera simple y fácil como amar a una mascota o a una persona de confianza. Luego continuamos con una persona más difícil de amar o perdonar. Sólo cuando nuestro corazón está completamente abierto, podremos practicar perdón con la situación más difícil.
“A veces, cuando llegamos a ese punto, el corazón se cierra de nuevo y se vuelve duro como una nuez”, dijo Kornfield. “Uno piensa que no va a poder perdonar nunca, pero es un buen momento para decirle a esa persona en nuestro corazón: ‘Ok, te voy a perdonar hoy, pero sólo un poquito’.
(English below)
Periodista, columnista y practicante e instructora de mindfulness. Tiene nueve años de experiencia en la cobertura de noticias generales (1999-2008) y diez años de experiencia en la cobertura específica de temas de salud holística (2008-2018). Como periodista de temas generales, fue reportera de WKAQ-Radio Reloj (1999-2005), redactora para la Agencia Española de Noticias EFE (2003-2005) y reportera para The Associated Press (2005-2008). Recibió premios de la Asociación de Periodistas de Puerto Rico (2001 y 2007), el Overseas Press Club (2008) y la Fundación Laura Rivera Meléndez (2007).
Desde el 2010, ha sido la autora de la columna “90 días”, que se publica en el periódico El Nuevo Día, la cual narra la arrojada travesía de una buscadora espiritual para encontrar sanación total y un profundo sentido de la vida.
En 2012 comenzó a escribir para la revista Daily Word / La Palabra Diaria y entre 2013 y 2015 fue la editora asociada de Laura Harvey, editora anterior de la revista. Aún escribe para ese medio. También ha escrito artículos para la revista Vibra Bien Magazine, y ha traducido innumerables artículos y folletos para la Sede Central de Unity en Missouri. Sus poemas han sido publicados en El Nuevo Día y Daily Word/La Palabra Diaria.
Oriunda de Puerto Rico, ha vivido en Valencia, España (2001), India (2010), Kansas City, Missouri (2010-2013); Unity Village, Missouri (2013-2015), y Escondido, California (2015-2016). Ha estudiado y practicado espiritualidad en ashrams, escuelas de yoga, monasterios, la Escuela de Cristianismo Práctico Unity y centros de meditación budista en las tradiciones theravada (vipassana), majaiana (zen) y tibetana.
Yaisha ha estudiado varios tipos de yoga desde el año 2004 en Puerto Rico, India y Estados Unidos. Conoció a B.K.S. Iyengar en Puna, India (2010) y estudió con dos estudiantes graduados de sus programas de enseñanza. En Estados Unidos, estudió con Judith Lasater (2011), quien trajo la yoga restaurativa a América; con Aadil Palkhivala (2011), cofundador de Purna Yoga; con Kim Lacy (2011-2015), maestra certificada en el sistema Iyengar, y con Mary Obendorfer (2011), maestra senior del sistema Iyengar y codirectora del Centro de Yoga B.K.S. Iyengar en San Diego. También impartió clases de yoga restaurativa durante dos años en Puerto Rico (2008-2010) y tuvo estudiantes cuando vivió en India (2010) y en Missouri (2011).
Comenzó a estudiar mindfulness en el año 2011 bajo la tutela de Robert Brumet en Kansas City, Missouri, quien estudió con el reconocido psicólogo Jack Kornfield, una de las figuras principales en traer el mindfulness y la tradición theravada del budismo (vipassana) a Occidente. Entre los maestros de mindfulness de Yaisha se destacan Brumet, Kornfield, Tara Brach, Kristin Neff (investigadora pionera de self-compassion), Chan Huy (quien estudió directamente con Thich Nhat Hanh), Lama Surya Das (contemporáneo de Ram Dass y Krishna Dass), las enseñanzas de Thich Nhat Hanh, Joseph Goldstein y Sharon Salzberg. Entre 2015 y 2016, vivió cerca del monasterio Deer Park en California, fundado por Thich Nhat Hanh en la tradición de Plum Village, donde practicaba todas las semanas y realizó tres retiros de mindfulness. Además, desde 2011 ha participado en retiros de mindfulness con Brumet (2011-2015), Lama Surya Das (2012-2014), Chan Huy (2014), Sally Armstrong (2016), Christianne Wolf (2016, 2018), Jack Kornfield (2015, 2017), Tara Brach (2017), Kristin Neff (2016, 2018), Mary Grace Orr (fundadora de Insight Santa Cruz, 2016, 2018), Bob Stahl (actual director de Insight Santa Cruz, 2016, 2018). Ha pertenecido a las sanghas de meditación de Robert Brumet (2011-2015) y Mindful Heart Meditation Sangha (2014-2015) en Kansas City, Missouri; así como a Insight San Diego (2015-2016) en California, Four-Fold Sangha en Deer Park Monastery, en Escondido, California (2015-2016), el Centro Zen de Puerto Rico (2015-2018) y el Centro de Zen Soto de Cupey (2018). Estudió con la escritora y maestra interespiritual y Mirabai Starr en 2015, y tomó cursos de mindful writing con Amy Spies en Insight L.A. en Los Ángeles, California (2016).
Actualmente, realiza una certificación en mindfulness a cargo de los reconocidos doctores en psicología Jack Kornfield y Tara Brach, la cual será otorgada en el 2019 por el Awareness Training Institute y el Greater Good Science Center en California.
Domina el medio de la radio y la oratoria, así como la redacción, edición y revisión de texto en español y en inglés. Ha traducido, editado y revisado traducciones, en trabajos tanto de libros como folletos, para Daily Word / La Palabra Diaria, la Sede Central de Unity, en Missouri; Al‑Anon Family Groups, en Virginia; la sede central de Centers for Spiritual Living, de la filosofía La Ciencia de la Mente de Ernest Holmes, en Colorado; el Center for Spiritual Living en Santa Rosa, California; Estudios Técnicos, Inc., en Puerto Rico; Newsela Inc., en Estados Unidos, y el Centro de Periodismo Investigativo en Puerto Rico.
Escribe, edita y traduce en ambos idiomas sobre los temas mencionados. Es dueña del sitio web www.mindfulwritings.com ❦
❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦ ❦
❦ Journalist, columnist, and mindfulness meditation practitioner and instructor. Yaisha has nine years of experience in hard-news coverage (1999-2008) and ten years of experience specifically in holistic health topics (2008-2018). As a hard-news journalist, she was a reporter for WKAQ-Radio Reloj (1999-2005), a writer for EFE International Spanish News Agency (2003-2005) and a reporter for The Associated Press (2005-2008). She earned awards from the Puerto Rico Journalists Association (2001 and 2007), the Overseas Press Club (2008) and Laura Rivera Meléndez Foundation (2007).
Since 2010, she has been the author of the column “90 días”, published by the Puerto Rican mainstream journal El Nuevo Día, in which she narrates the daring journey of a spiritual seeker to find deep and definite healing and meaning.
In 2012 she began writing for the Daily Word / La Palabra Diaria magazine, and between 2013 and 2015 she was the associate editor of Laura Harvey, former editor of the magazine. She still writes for Daily Word. She has also published articles on Vibra Bien Magazine and has translated countless articles and booklets for Unity World Headquarters at Unity Village, Missouri. Her poems have been published in El Nuevo Día and Daily Word/La Palabra Diaria.
A native Puerto Rican, she has lived in Valencia, Spain (2001), India (2010), Kansas City, Missouri (2010-2013); Unity Village, Missouri (2013-2015), and Escondido, California (2015-2016). She has studied and practiced spirituality in ashrams, yoga schools, monasteries, Unity School of Practical Christianity and Buddhist meditation centers in the Theravada (Vipassana), Mahayana (Zen) and Tibetan traditions.
Yaisha has studied several styles of yoga since 2004 in Puerto Rico, India, and the U.S. She met B.K.S. Iyengar in Puna, India (2010) and studied with two Iyengar Yoga teachers. In the U.S., she studied with Judith Lasater (2011), who brought the restorative yoga system to America; with Aadil Palkhivala (2011), co-founder of Purna Yoga; with Kim Lacy (2011-2015), certified teacher in the Iyengar Yoga system, and with Mary Obendorfer (2011) senior teacher of the Iyengar Yoga system and co-director of the B.K.S. Yoga Centers of San Diego. She also taught restorative yoga in Puerto Rico for two years (2008-2010), and had students when she lived in India (2010) and Missouri (2011).
She began studying mindfulness in 2011 with Robert Brumet in Kansas City, Missouri, who studied with renowned Buddhist psychologist Jack Kornfield. Kornfield is of the key figures in bringing mindfulness and the Buddhist Theravada tradition (Vipassana) to the West. Among Yaisha’s mindfulness teachers are Brumet, Kornfield, Tara Brach, Kristin Neff (pioneer researcher of self-compassion), Chan Huy (who studied directly with Thich Nhat Hanh), Lama Surya Das, the teachings of Thich Nhat Hanh, Joseph Goldstein, and Sharon Salzberg. Between 2015 and 2016, she lived close to Deer Park Monastery in Escondido, California, founded by Thich Nhat Hanh in the tradition of Plum Village, where she practiced every week and did three mindfulness retreats. Also, since 2011 she as attended mindfulness retreats with Brumet (2011-2015), Lama Surya Das (2012-2014), Chan Huy (2014), Sally Armstrong (2016), Christianne Wolf (2016, 2018), Jack Kornfield (2015, 2017), Tara Brach (2017), Kristin Neff (2016, 2018), Mary Grace Orr (founder of Insight Santa Cruz, 2016, 2018), Bob Stahl (current director of Insight Santa Cruz, 2016, 2018). She has belonged to the meditation sanghas of Robert Brumet (2011-2015) and Mindful Heart Meditation Sangha (2014-2015) in Kansas City, Missouri; and also, to Insight SD (2015-2016) in San Diego, California, Four-Fold Sangha in Deer Park Monastery in Escondido, California (2015-2016), the Puerto Rico Zen Center (2015-2018) and the Puerto Rizo Soto Zen Center of Cupey (2018). She studied with inter-spiritual teacher and writer Mirabai Starr in 2015 and took mindful writing courses with Amy Spies in Insight LA in Los Angeles, California (2016).
She is currently a student in the first class of the Mindfulness Meditation Teacher Certification Program, of which the main teachers are Buddhist psychologists Jack Kornfield and Tara Brach. She will be certified in 2019 by the Awareness Training Institute and the Greater Good Science Center in California.
She is a skilled radio host, public speaker, writer, editor, translator, and proofreader in both English and Spanish. She has translated, edited, and proofread translations for booklets and books for Daily Word / La Palabra Diaria, Unity World Headquarters in Missouri, Al‑Anon Family Groups, in Virginia; the headquarters for the Centers for Spiritual Living, the philosophy of The Science of Mind by Ernest Holmes, in Colorado; the Center for Spiritual Living in Santa Rosa, California; Estudios Técnicos, Inc., in Puerto Rico; Newsela Inc., in the U.S. and the Center for Investigative Journalism in Puerto Rico.
She writes, edits, and translates in both languages about the topics mentioned above. Yaisha is the owner of the website www.mindfulwritings.com ❦
View all posts by Yaisha Vargas-Pérez
2 Comments
En el primer parafo de este articulo usted menciona un tratamiento con la terapista de activacion linfatica que la trataba con las hierbas chinas “Para Cleanse” y “Tiao He Cleanse” . Yo vivo en Puerto Rico y me interesa someterme a dicho tratamiento. Me podria usted enviar mas informacion al respecto. Gracias!
Saludos Sylvette – La terapista de activación linfática que me ha ayudado se llama Terry Hug, y está en el estado de Missouri. Te doy la información de su página de internet: http://www.terryhug.com
Yo me mudé de Puerto Rico buscando más posibilidades de sanación. Eso fue lo que yo hice. A mí me funcionó, pero también puedo comprender que a cada persona le funciona algo diferente. 🙂
En el primer parafo de este articulo usted menciona un tratamiento con la terapista de activacion linfatica que la trataba con las hierbas chinas “Para Cleanse” y “Tiao He Cleanse” . Yo vivo en Puerto Rico y me interesa someterme a dicho tratamiento. Me podria usted enviar mas informacion al respecto. Gracias!
Saludos Sylvette – La terapista de activación linfática que me ha ayudado se llama Terry Hug, y está en el estado de Missouri. Te doy la información de su página de internet: http://www.terryhug.com
Yo me mudé de Puerto Rico buscando más posibilidades de sanación. Eso fue lo que yo hice. A mí me funcionó, pero también puedo comprender que a cada persona le funciona algo diferente. 🙂