Por Samadhi Yaisha/ una versión de esta crónica fue publicada el domingo 10 de julio de 2011 en el diario puertorriqueño “El Nuevo Día”
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“El camino espiritual se hace cada vez más y más estrecho y solitario”, me auguró Déborah (nombre ficticio) mientras meditábamos frente al Sol con los pies en la piscina llanita de losas negras. Amanecía en el ashram de Osho en Puna, India.
Teníamos la misma edad. Al igual que yo, había sido periodista de hard news; ella en México, y yo en Puerto Rico. Igual a mí, había comprado un apartamento soñado y se había gastado una fortuna en la remodelación. Había manejado su carro anhelado, como yo había comprado el híbrido de esmalte rojo que ansié durante cinco años. Ella se había casado con “el hombre perfecto”, y yo con una carrera que amaba… Hasta que todo comenzó a desmoronarse. Ya no funcionaba. Mientras ella resentía su vida cuadriculada, yo me sentaba sobre mi mobiliario tailandés e indio con el corazón igual de acongojado, porque el único confort que tenía era poder llorar sobre muebles más caros. Y la crisis engordó hasta estallar, en el caso de ella, como divorcio y renuncia a su trabajo; y en el mío, como el divorcio de mi carrera, porque ya me daba náuseas prestar mis neuronas para escribir de la política burda y circular; mis dedos ya sangraban de reportar tanta sangre; fallecían los poemas que tenía en la barriga, y la muerte -que entonces la veía enemiga- me había arrebatado gente querida. Así que poco a poco, en voz baja, me fui refugiando en la yoga y la meditación hasta que un día salí del clóset espiritual, aún temiendo el rechazo. Me atrevía a vivir otra vida. Lo abandoné todo, hasta el nombre.
Algo se transmuta en el interior cuando alcanzas lo que más querías material y profesionalmente, y no te sientes más feliz. Como el juguete de Navidad que pierde su magia al día siguiente. Y esa insatisfacción crece hasta convertirse en la desesperanza y el encierro que una aprovecha para vestir la infelicidad con más comida, más cigarillos, la botella de licor ligero y frutoso, otra relación disfucional, más tacones de felpa negra, y todos los capítulos de Sex in the City, porque de repente esas chicas de la pantalla a lo mejor tengan la respuesta, o quizás sea el antidepresivo de moda, o puede ser las poetas que lees, pero ellas también andan tristes; a lo mejor los cursos de mejoramiento personal que funcionaron por dos o tres años y se desinflaron. Puede ser, entonces, estudiar una carrera nueva, cambiar las amistades, cambiar las reglas. Si no es eso, entonces debe ser que la lucha política tiene la solución… porque quizás en otro país ha funcionado. Alguno cuya bandera ondee en la ONU y en el miradero de la Torre Eiffel, donde la tuya no aparece…
Y algo pasa también más allá de las fronteras de tu percepción y tu piel cuando decides dar un salto cuántico al interior porque nada afuera te ha funcionado: todo el mundo te dice que no lo hagas.
“Tus amigos y tu familia te cuestionan cómo vas a pagar las cuentas y el seguro médico. ¿Y qué me importa el seguro médico, si la vida que llevo no funciona?”, me decía la ex periodista mexicana, mientras yo le respondía que su historia era la mía. Aunque yo había dado un paso más. Tras aquel brinco, parecí hallar respuestas y consuelo a los pies de una gurú, a quien lentamente le entregué mi historia y voluntad. Viví un periodo casi bucólico. Pero incluso eso, mi último cartucho, fracasó en dos años. Me fui con el corazón más desbaratado que cuando llegué.
Déborah y yo nos quedamos en silencio. Ninguna se atrevía a mencionar lo próximo: ¿y qué vamos a hacer cuando salgamos del ashram? ¿Volver a una vida que no nos funciona? Suspiramos al unísono, mirando nuestros pies bajo el agua. Repasé mi vida en retroceso, y se me hizo claro ese constante ansío de libertad, así, como un verbo. No ser esclava de nada ni nadie. Y le dije:
— He encontrado tanta gente en este ashram y en mi camino que ha vivido lo mismo que tú y yo. ¿Y qué tal si ésa es la respuesta: una patada hacia la libertad? —
Se nos brotó una risa franca que fue in crescendo, como si por fin nos diéramos cuenta que la Vida había respondido así a nuestra infelicidad y a nuestra insistencia de aferrarnos a lo que no funcionaba. Al revisar lo que dejamos atrás, nos dábamos cuenta lo que no éramos: sumisas, subyugadas, compradoras compulsivas, parejas decorativas, objetos sexuales, altavoces de desesperanza, mentes débiles o incapaces de serenidad.
Que todo aquello que había fracasado nos había obligado a desterrar de nuestras mentes todas las voces ajenas y a expulsar el marasmo de lo que nos habían programado los demás en la cabeza, esclavizando nuestra espontaneidad con sus expectativas.
Comenzábamos a ver el néctar de la meditación: entender que nuestra propia esencia era la verdaderamente digna de reverencia. “Y aún no has visto tu propia estatura. Has vivido en el portal y no has entrado al palacio. Eres más grande que ti misma, superior, más vasta. Eso que es más grande y trascendental en ti es lo que llamamos Dios”, decía el gurú de este ashram. Al inclinarme la primera vez sobre su lugar de descanso eterno, me topé con un espejo, y cuando vi mi imagen, me asusté. Volví a asomarme, despacito, para tratar de acostumbrarme a la idea de que la respuesta era yo misma, era reverenciar la Vida misma que latía en mí.
(English below)
Periodista, columnista y practicante e instructora de mindfulness. Tiene nueve años de experiencia en la cobertura de noticias generales (1999-2008) y diez años de experiencia en la cobertura específica de temas de salud holística (2008-2018). Como periodista de temas generales, fue reportera de WKAQ-Radio Reloj (1999-2005), redactora para la Agencia Española de Noticias EFE (2003-2005) y reportera para The Associated Press (2005-2008). Recibió premios de la Asociación de Periodistas de Puerto Rico (2001 y 2007), el Overseas Press Club (2008) y la Fundación Laura Rivera Meléndez (2007).
Desde el 2010, ha sido la autora de la columna “90 días”, que se publica en el periódico El Nuevo Día, la cual narra la arrojada travesía de una buscadora espiritual para encontrar sanación total y un profundo sentido de la vida.
En 2012 comenzó a escribir para la revista Daily Word / La Palabra Diaria y entre 2013 y 2015 fue la editora asociada de Laura Harvey, editora anterior de la revista. Aún escribe para ese medio. También ha escrito artículos para la revista Vibra Bien Magazine, y ha traducido innumerables artículos y folletos para la Sede Central de Unity en Missouri. Sus poemas han sido publicados en El Nuevo Día y Daily Word/La Palabra Diaria.
Oriunda de Puerto Rico, ha vivido en Valencia, España (2001), India (2010), Kansas City, Missouri (2010-2013); Unity Village, Missouri (2013-2015), y Escondido, California (2015-2016). Ha estudiado y practicado espiritualidad en ashrams, escuelas de yoga, monasterios, la Escuela de Cristianismo Práctico Unity y centros de meditación budista en las tradiciones theravada (vipassana), majaiana (zen) y tibetana.
Yaisha ha estudiado varios tipos de yoga desde el año 2004 en Puerto Rico, India y Estados Unidos. Conoció a B.K.S. Iyengar en Puna, India (2010) y estudió con dos estudiantes graduados de sus programas de enseñanza. En Estados Unidos, estudió con Judith Lasater (2011), quien trajo la yoga restaurativa a América; con Aadil Palkhivala (2011), cofundador de Purna Yoga; con Kim Lacy (2011-2015), maestra certificada en el sistema Iyengar, y con Mary Obendorfer (2011), maestra senior del sistema Iyengar y codirectora del Centro de Yoga B.K.S. Iyengar en San Diego. También impartió clases de yoga restaurativa durante dos años en Puerto Rico (2008-2010) y tuvo estudiantes cuando vivió en India (2010) y en Missouri (2011).
Comenzó a estudiar mindfulness en el año 2011 bajo la tutela de Robert Brumet en Kansas City, Missouri, quien estudió con el reconocido psicólogo Jack Kornfield, una de las figuras principales en traer el mindfulness y la tradición theravada del budismo (vipassana) a Occidente. Entre los maestros de mindfulness de Yaisha se destacan Brumet, Kornfield, Tara Brach, Kristin Neff (investigadora pionera de self-compassion), Chan Huy (quien estudió directamente con Thich Nhat Hanh), Lama Surya Das (contemporáneo de Ram Dass y Krishna Dass), las enseñanzas de Thich Nhat Hanh, Joseph Goldstein y Sharon Salzberg. Entre 2015 y 2016, vivió cerca del monasterio Deer Park en California, fundado por Thich Nhat Hanh en la tradición de Plum Village, donde practicaba todas las semanas y realizó tres retiros de mindfulness. Además, desde 2011 ha participado en retiros de mindfulness con Brumet (2011-2015), Lama Surya Das (2012-2014), Chan Huy (2014), Sally Armstrong (2016), Christianne Wolf (2016, 2018), Jack Kornfield (2015, 2017), Tara Brach (2017), Kristin Neff (2016, 2018), Mary Grace Orr (fundadora de Insight Santa Cruz, 2016, 2018), Bob Stahl (actual director de Insight Santa Cruz, 2016, 2018). Ha pertenecido a las sanghas de meditación de Robert Brumet (2011-2015) y Mindful Heart Meditation Sangha (2014-2015) en Kansas City, Missouri; así como a Insight San Diego (2015-2016) en California, Four-Fold Sangha en Deer Park Monastery, en Escondido, California (2015-2016), el Centro Zen de Puerto Rico (2015-2018) y el Centro de Zen Soto de Cupey (2018). Estudió con la escritora y maestra interespiritual y Mirabai Starr en 2015, y tomó cursos de mindful writing con Amy Spies en Insight L.A. en Los Ángeles, California (2016).
Actualmente, realiza una certificación en mindfulness a cargo de los reconocidos doctores en psicología Jack Kornfield y Tara Brach, la cual será otorgada en el 2019 por el Awareness Training Institute y el Greater Good Science Center en California.
Domina el medio de la radio y la oratoria, así como la redacción, edición y revisión de texto en español y en inglés. Ha traducido, editado y revisado traducciones, en trabajos tanto de libros como folletos, para Daily Word / La Palabra Diaria, la Sede Central de Unity, en Missouri; Al‑Anon Family Groups, en Virginia; la sede central de Centers for Spiritual Living, de la filosofía La Ciencia de la Mente de Ernest Holmes, en Colorado; el Center for Spiritual Living en Santa Rosa, California; Estudios Técnicos, Inc., en Puerto Rico; Newsela Inc., en Estados Unidos, y el Centro de Periodismo Investigativo en Puerto Rico.
Escribe, edita y traduce en ambos idiomas sobre los temas mencionados. Es dueña del sitio web www.mindfulwritings.com ❦
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❦ Journalist, columnist, and mindfulness meditation practitioner and instructor. Yaisha has nine years of experience in hard-news coverage (1999-2008) and ten years of experience specifically in holistic health topics (2008-2018). As a hard-news journalist, she was a reporter for WKAQ-Radio Reloj (1999-2005), a writer for EFE International Spanish News Agency (2003-2005) and a reporter for The Associated Press (2005-2008). She earned awards from the Puerto Rico Journalists Association (2001 and 2007), the Overseas Press Club (2008) and Laura Rivera Meléndez Foundation (2007).
Since 2010, she has been the author of the column “90 días”, published by the Puerto Rican mainstream journal El Nuevo Día, in which she narrates the daring journey of a spiritual seeker to find deep and definite healing and meaning.
In 2012 she began writing for the Daily Word / La Palabra Diaria magazine, and between 2013 and 2015 she was the associate editor of Laura Harvey, former editor of the magazine. She still writes for Daily Word. She has also published articles on Vibra Bien Magazine and has translated countless articles and booklets for Unity World Headquarters at Unity Village, Missouri. Her poems have been published in El Nuevo Día and Daily Word/La Palabra Diaria.
A native Puerto Rican, she has lived in Valencia, Spain (2001), India (2010), Kansas City, Missouri (2010-2013); Unity Village, Missouri (2013-2015), and Escondido, California (2015-2016). She has studied and practiced spirituality in ashrams, yoga schools, monasteries, Unity School of Practical Christianity and Buddhist meditation centers in the Theravada (Vipassana), Mahayana (Zen) and Tibetan traditions.
Yaisha has studied several styles of yoga since 2004 in Puerto Rico, India, and the U.S. She met B.K.S. Iyengar in Puna, India (2010) and studied with two Iyengar Yoga teachers. In the U.S., she studied with Judith Lasater (2011), who brought the restorative yoga system to America; with Aadil Palkhivala (2011), co-founder of Purna Yoga; with Kim Lacy (2011-2015), certified teacher in the Iyengar Yoga system, and with Mary Obendorfer (2011) senior teacher of the Iyengar Yoga system and co-director of the B.K.S. Yoga Centers of San Diego. She also taught restorative yoga in Puerto Rico for two years (2008-2010), and had students when she lived in India (2010) and Missouri (2011).
She began studying mindfulness in 2011 with Robert Brumet in Kansas City, Missouri, who studied with renowned Buddhist psychologist Jack Kornfield. Kornfield is of the key figures in bringing mindfulness and the Buddhist Theravada tradition (Vipassana) to the West. Among Yaisha’s mindfulness teachers are Brumet, Kornfield, Tara Brach, Kristin Neff (pioneer researcher of self-compassion), Chan Huy (who studied directly with Thich Nhat Hanh), Lama Surya Das, the teachings of Thich Nhat Hanh, Joseph Goldstein, and Sharon Salzberg. Between 2015 and 2016, she lived close to Deer Park Monastery in Escondido, California, founded by Thich Nhat Hanh in the tradition of Plum Village, where she practiced every week and did three mindfulness retreats. Also, since 2011 she as attended mindfulness retreats with Brumet (2011-2015), Lama Surya Das (2012-2014), Chan Huy (2014), Sally Armstrong (2016), Christianne Wolf (2016, 2018), Jack Kornfield (2015, 2017), Tara Brach (2017), Kristin Neff (2016, 2018), Mary Grace Orr (founder of Insight Santa Cruz, 2016, 2018), Bob Stahl (current director of Insight Santa Cruz, 2016, 2018). She has belonged to the meditation sanghas of Robert Brumet (2011-2015) and Mindful Heart Meditation Sangha (2014-2015) in Kansas City, Missouri; and also, to Insight SD (2015-2016) in San Diego, California, Four-Fold Sangha in Deer Park Monastery in Escondido, California (2015-2016), the Puerto Rico Zen Center (2015-2018) and the Puerto Rizo Soto Zen Center of Cupey (2018). She studied with inter-spiritual teacher and writer Mirabai Starr in 2015 and took mindful writing courses with Amy Spies in Insight LA in Los Angeles, California (2016).
She is currently a student in the first class of the Mindfulness Meditation Teacher Certification Program, of which the main teachers are Buddhist psychologists Jack Kornfield and Tara Brach. She will be certified in 2019 by the Awareness Training Institute and the Greater Good Science Center in California.
She is a skilled radio host, public speaker, writer, editor, translator, and proofreader in both English and Spanish. She has translated, edited, and proofread translations for booklets and books for Daily Word / La Palabra Diaria, Unity World Headquarters in Missouri, Al‑Anon Family Groups, in Virginia; the headquarters for the Centers for Spiritual Living, the philosophy of The Science of Mind by Ernest Holmes, in Colorado; the Center for Spiritual Living in Santa Rosa, California; Estudios Técnicos, Inc., in Puerto Rico; Newsela Inc., in the U.S. and the Center for Investigative Journalism in Puerto Rico.
She writes, edits, and translates in both languages about the topics mentioned above. Yaisha is the owner of the website www.mindfulwritings.com ❦
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