Los espejos de cola -❦- The Grand Mirrors

(English below)

Los espejos de cola

Por Yaisha Vargas-Pérez para la sección “Poesía❦” del blog “90 días”

Me casé con un amor que nunca llegó.

Me comprometí con un ser que no existía.

Me enamoré de aguardar a la nada.

Y cuando entendí por fin que jamás llegaría,

me giré para regresar

y me topé con un espejo

que me había perseguido

con la misma ansiedad

(“¡ámame, ámame!”)

que me desbocó hacia los otros;

los que vivían fuera de mí misma

y de sí mismos

—seres de nubes grises

que también tenían por cola un espejo

mientras corrían hacia los demás.

Abracé al espejo sin juicios,

lo atravesé para conocer quién andaba ahí.

Y dejé de perseguir seres perdidos.

2011

 

De la #Colección2012

© Copyright – Todos los derechos reservados

Síguenos en Facebook: Visita el grupo 90 días: una jornada para sanar y también el FanPage de Yaisha Vargas

Síguenos en Twitter: @SamadhiYaisha

(English below)

20150526_194335
Foto por Yaisha Vargas-Pérez, Arizona 2015.

❦❦❦❦❦❦❦❦❦❦❦❦❦

The Grand Mirrors

By Yaisha Vargas-Pérez for the “Poetry❦” section”of the blog “90 days”

I married a love that never arrived.

I got engaged to a being who didn’t exist.

I fell in love with awaiting the nothingness.

And when I finally understood it would never get here,

I turned to go back

and stumbled upon a mirror

that framed me

with the same anx

(“love me!” “love me!”)

that led me to run wild toward the others,

the ones living outside of myself

and outside of themselves

—beings of gray clouds

who were also stalked by a grand mirror

while chasing the others.

I embraced the mirror without judgments,

and crossed through to meet whoever lived there.

And then I stopped following lost beings.

2011

From the #2012Collection

Copyright © – All rights reserved. 

Follow us on Facebook: Visit the group “90 days: A Journey to Heal” and Yaisha’s Fan Page

Follow us on Twitter: @SamadhiYaisha

3 Comments

  1. Aquí te comento dos porque con el del Perdón no pude entrar a contestar.
    El primero:
    Perdón…es difícil pedir perdón, yo tampoco me atreví a pedirte perdón y aquí aprovecho para hacerlo. En una ocasión cuando tu columna comentaba tu viaje en el Gran Cañon del Colorado me asusté cuando te vi parada al pie del abismo y te lo comenté quizás de la manera mas incorrecta, en ese entonces no entendí porque nunca más me comentaste alguno de mis escritos. Pero luego en otra de tus columnas de los 90 días hablaste de los seres controladores y me vi retratada y avergonzada por mi actitud. Nunca te pedí perdón y entiendo que ningún cariño da derecho a tratar de controlar a otra persona. Así que ahora te pido Perdón Yaisha. Si alguna vez te molesté no fue mi intención, ilusa de mí, solo pensaba en protegerte. Ahora puedo decir que tu actitud me dio una enseñanza a la vez que me sanaste con ese poema.
    EL segundo: Los espejos de cola
    Mi vida está hecha de espejos de cola rotos…pero luego me percato que ninguno de esos espejos me convenía, solo entonces puedo continuar feliz y sola…Cuando no soy nada, ni tengo nada, encuentro todo y entrego todo, me basta con mirar al cielo y encuentro consuelo.
    Hasta luego y que disfrutes los días venideros!
    PS: Me encantan tus fotografías!

    1. Querida Mayra: Siento mucho no haber respondido a tu mensaje aquella vez. A veces he tenido momentos donde todo ha ido muy rápido (varias mudanzas, cuidar a mi gatito que estaba enfermo, ayudar a mi papá en su vejez, más mi trabajo full time y ahora estoy estudiando también) y no me he podido sentar a responder todos los mensajes en las diferentes páginas de redes sociales y blogs. Pero eso no tiene que ver con lo que la gente pone, sino con mi disponibilidad para contestar. A veces he podido leerlo, sonrío y digo “lo contesto después” y se me olvida porque me siguen llegando cosas que hay que atender con premura. ❤ Te envío un fuerte abrazo. Siempre sonrío cada vez que veo que comentas en alguna de las entradas que publico. Sé que no le he podido contestar a todo el mundo. 😦 Es razonable que la gente se preocupe. Algunas etapas de mi viaje han sido arriesgadas. No tengo miedo, pues voy siguiendo la luz interior que me guía. Me encanta que me escribas y desconocía que habías tenido esa experiencia. Escribo para esparcir la sabiduría que la vida me da con tanta generosidad, nada más. ❤ Te envío un abrazo fuerte con mucha alegría. Gracias, gracias, con todo mi corazón, por seguir la jornada. ❤ Que tengas un hermoso día. ❤

Leave a reply to Yaisha Vargas-Pérez Cancel reply